Wednesday, July 23, 2008

dislexia existencial

Algo me pasa, le digo a A. Tengo dislexia, y se me queda mirando con cara de '¿y te acabas de dar cuenta?' No, es decir, está empeorando. Escribo mal los números de teléfono, digo una cosa por otra, confundo lugares, nombres. Estás cansada, estresada, harta.
Si, pero no es todo.
Algo me pasa.
Mi torpeza es proverbial, a veces creo que es lo único que mis amigos saben con certeza de mí: soy torpe, muy torpe, tengo cicatrices en las manos, en las piernas, mis rodillas parecen las de una niña de cinco años. A decir verdad, creo que nunca he visto mis piernas sin un moretón... Soy yo la que rompe los vasos en las fiestas, la que tira el adorno de la abuelita... usar ropa blanca es casi un crimen... soy torpe, pues, me caigo, me tropiezo... y tengo dislexia...

Más ahora que antes, hoy confundí Texas con Kansas, háganme el favron cabor...

algo me pasa...

¿será que la dislexia tiene que ver con un deseo escondido, oculto, de voltear el mundo al revés? Pienso en un especial de Halloween de los Simpson, un virus hace que la gente se voltee de revés, termina la familia bailando, vísceras expuestas... happy happy joy joy, la escena me llena de ternura